martes, 29 de junio de 2010

Lo que han visto los ojos

Miramos para otro lado,
olvidamos lo que nos contaron,
justificamos lo que hicimos,
terminamos tragando lo que se nos anudó en la garganta...
Pero, tarde o temprano,
el corazón nos devuelve
lo que han visto los ojos.

viernes, 25 de junio de 2010

El séptimo día

Todas las cosas estaban ya creadas la mañana del sexto día:
el mar y el desierto,
el fuego y la nieve,
la piel y los labios,
la sangre y el hierro,
el diente y la garganta...
Dios estaba tan cansado, y aún faltaba lo más duro:
el bien y el mal.
Entonces, Dios creo al hombre;
y al séptimo día pudo descansar.

martes, 15 de junio de 2010

Fui llegando, irremediablemente, poco a poco, cada vez más cerca, intuyendo primero el continente, el país después, la costa, la boca del puerto, el malecón, el hueco de mi amarre...

Fui llegando como si lo tuviera todo ya premeditado, como si alguna vez lo hubiera deseado, como si yo lo hubiera ido buscando.

Pero no fue así; no es cierto.

Llegué porque todas las aguas de la tierra, todas las cruces del sur y todos los carros de la osa, el universo entero fue cediendo como un colchón de plumón blanco de albatros hacia un hueco recóndito abierto para que, en un momento milimétricamente preparado, se encontrara la madera mojada de mi casco con la madera mojada del muelle.

Un golpe seco.

Tierra.