lunes, 27 de mayo de 2013

Atento yo en el sur




No sabría decir
-así, en pie-
si todas las heridas duelen igual
o si el dolor depende
de la mano
o el filo.

Tendrían que herirme
al mismo tiempo
por tres de mis puntos cardinales
y atento yo
en el sur
medir mi muerte.

Ya no recuerdo
si todas las heridas son iguales
o juegan a ser nubes
necrosadas y pálidas
extendidas al cielo
de una piel desgastada.

Pero puedo decir
-aquí de pie,
a solas
y en el silencio-
que todas las cicatrices
responden a la vez
al mismo nombre.


viernes, 17 de mayo de 2013

Tesoro


Mío es:
Lo que no pueda perder en un naufragio,
lo que no necesite recordar cada mañana,
lo que no pueda olvidar con la distancia,
lo que permanezca a través del tiempo,
lo que vaya marcando mis arrugas,
lo que no pueda dejarlo como herencia,
lo que pueda transmitir con mi presencia...
Lo que no pueda llevarse el ladrón que entra en mi casa,
el mar, la luna, el sol... el horizonte detrás de mi ventana.



viernes, 3 de mayo de 2013

La dureza del agua


Detenida, hasta el agua es dura. 

El pasado, congelado en nuestros recuerdos, termina mordiendo un dolor insoportable.

El futuro, sujeto a nuestros deseos, es siempre una quimera vana.

La vida es un movimiento que se transforma en muerte en cuanto deja de fluir.

Por eso, no te relaciones con el pasado ni con el futuro; vive el presente con el corazón agradecido y el asombro en los ojos.