Todo lo que me consume es negro:
el vacío del universo,
su frío insondable,
la palada de tierra sobre la tumba,
las pupilas que se fueron para siempre…
Y aunque el silencio es blanco,
es negra la falta de las voces que no llegan.
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No dejes que te consuma por completo, que tus letras son muy buenas y sentidas y así podrás seguir escribiendo. Me gusdta tu blog. Te sigo
ResponderEliminarConsumir........
ResponderEliminarsin obsesión....
de lo contrario es tiempo perdido.
Consumirse solo por la pasión.
Seguir para que la pasión vuelva a inundar
ese espacio.
Hola Nueva Luna.
ResponderEliminarEl fondo, la superficie, la luz, las sombras... ciclos del viaje. Seguimos, claro que seguimos, y bebiéndolo todo con asombro y gozo.
Luego me daré un paseo ingrávido y gentil (como pompas de jabón) por tu luna.
Un beso.
MBI
Tú lo has dicho: consumirse sin luz, ese es el peligro. Lo demás, consumirse y arder, es VIDA.
Me gusta asomarme a tus ventanas, siempre abiertas.
Un beso.
A mí casi se me atraganta más el gris que el negro.
ResponderEliminarCierto, Juanjo. El gris atrapa en ese verlotodoenblancoynegro (y en zona 5) rutinario y monótono. Del negro siempre se salta a la luz.
ResponderEliminarYo vivo en Londres, el color gris.
ResponderEliminarTu poema es hermoso.
Gracias, Almudena.
ResponderEliminarUn poema en blanco y negro, que no es gris, más bien todo lo contrario. Me imagino que cuando al sol le de por asomarse en Londres... como que será más luz esa luz meliflua que saque los colores.
Un beso.
Tengo un modesto blog de poesia que le he llamado "abarloarse". Me gustó esa palabra por la metafora que señala, y me alegra que en otro sitio alguien utilice "abarloados" para decir "abarloemonos, amor bajo los ultimos rayos de poniente...". Un saludo de Fernando Moreno (Madrid)
ResponderEliminarGracias, Fernando. También me alegra que alguien más ande abarloándose a los sueños y las esperanzas. Pongo tu blog en favoritos; siempre es bueno desayunarse un poema.
ResponderEliminarUn abrazo.